martes, 26 de junio de 2012

Sesuda y los relatos zen V

Los sentidos nos engañan, pero el error puede ser un paso hacia la sabiduría. La realidad no está fuera de la percepción sino en ella.


sábado, 16 de junio de 2012

La velocidad de las curvas

Otro mártir. Podríamos pensar que si a este ingeniero no le hubiera interesado la tipografía se habrían salvado muchas vidas. Pero es mezquino pensarlo así. Sencillamente se trató de un malentendido que no echa por tierra las virtudes de los nobles y abnegados tipógrafos que cada día nos hacen la vida mejor.
Un tipógrafo de carrera –carrera corta, en este caso– que pagó con la muerte sus breves quince minutos de fama. Recordemos hoy a Giuseppe Tiramisú, pionero de la ingeniería tipográfica.


domingo, 10 de junio de 2012

Entrenamientos terribles

En estos tiempos en el que un jugador con fatiga muscular descansa semanas en un banco de suplentes, recordamos a los sufridos aviadores del régimen nipón del siglo pasado, que sin mediar queja, se sometían a los más dolorosos entrenamientos por el bien de su patria.


martes, 5 de junio de 2012

Conversaciones con Sesuda VI


Tsetsuko se acercó al maestro abrumado por una duda. ¿Puedo ser monje y adinerado al mismo tiempo?, preguntó. El anciano Sesuda giró sobre sí mismo con un gesto que podría ser interpretado como profundo fastidio, excepto para quienes lo conocemos, que sabemos que se trata de poner al discípulo en situación de disponibilidad para el aprendizaje. Escupió rápidamente en el suelo el chicle Bazooka y repreguntó: 

–¿Qué es ser rico?
–Tener mucho dinero
–¿Solo el dinero nos hace ricos?
–¿No es así?
–Es una cuestión cultural, para un caníbal ser rico es otra cosa
–Me gustan mucho las tribus antropófagas
–Probablemente tu a ellos también les gustarías
–Entonces para ellos somos ricos, pero no podemos disfrutar de esa riqueza sin perder la vida
–¿Se es rico si se posee mucho pero no se puede usar?
–Rico no es el que más tiene sino el que menos necesita.
–No, rico es el que más tiene.
–Pero... ¿y el valor de una sonrisa, del afecto, de la puesta del sol?
–Todos valoran una sonrisa, pero ¿has probado pagar un paquete de arroz en el supermercado con ella?
–Y eso que son chinos.
–No creas que no valoro tus progresos, cada vez eres más ignorante.
–Solo me vacío de lo que sé, como una piscina pierde el agua si se le saca el tapón.
­–Como un inodoro después de una descarga.
–Sí, o una piscina...
–Sí, o un inodoro.

A veces una breve conversación casual es suficiente. La sabiduría profunda no tiene medida. 
Sesuda se marchó rascándose la entrepierna mientras simulaba buscar algo en su bolsillo. 
Tsetsuko era ahora más sabio.